Pués bien ahora que mi post a cambiado de rumbo no me queda más que recordar y agradecer esos días en los que si me gustaba ir a los mandados. aquellos en los que iba a la papelería a comprar una biografía del guajolote solo para ir a jugar mi primer invaders, era emocionante y traumante ya que el dinero era poco y las ganas de jugar muchas, luego vino el Boom la madre de todos los juegos de Papelerías y farmacias el Extrit Faiter 2 me la pasaba inventando pretextos para ir a la tiendita donde estaba, no me importaba no jugar, el hecho de ver y mover la palanca (aun lo hago con la mía propia) me hacía feliz, y más cuando un alma caritativa te regalaba un juego, o cuando ya sabíamos que estaba el señor que las arreglaba y que cuando terminaba nos daba coins gratis, ahhh que días aquellos, aunque no todo fué bueno, también hubo regaños y madrizas y esque uno se vuelve delincuente juvenil al no tener para echarle a las famosas maquinitas, o quién no perdía los cambios de los mandados?, quién no compraba menos huevo, e incluso regresaba a casa satisfecho de un juego y sin tortillas, recuerdo que lo veían uno y le preguntaban -y las tortillas Mauricio ?- a lo que uno respondía - hay mamá esque se me perdió el dinero -, a lo que mi mami me decía encabronada -y la servilleta?- era entonces cuando uno se daba cuenta , upsss puta madre la deje encima de la maquinita que pendejo ,(no me digan que no les paso); después me volvi delincuete organizado, y asi con mi primo no solo aprendí a decir grocerías, también aprendí que las monedas descontinuadas de un peso que usaban mis tíos, si uno las tallaba en el piso podían entrar en la ranura de la maquinita y darnos creditos, por suerte para mi y mi primo mis tíos tenían un bote lleno jajaja , vinieron rondanas, alambres y todo aquel mito urbano que según te daba creditos, hasta abrimos una maquina que solo tenia unos tornillos mal puestos y nos regalabamos creditos, y lo más bajo,llegué a robar dinero del monedero de mi mamá, eso era todo un vicio.
Después los juegos cambiarón y ya no solo se trataba de jugar si no de partirle la madre a los weyes con los que no te llevabas y destrozarles el orgullo, todo empezo con la estatua de Guile en Extrit faiter, luego a apagar o desconectar las maquinas a los odiados rivales y mi última y favorita, aunque nunca fuí bueno jugando hubo un tiempo en que les era díficil sacarme en KOF-97 a un grupo de Ogetes que no tragaba y que no me tragaban, asi que después de sus 10 pesotes sin sacarme venía la más grande humillación para un retador de maquinitas,( aun disfruto recordandolo) volteaba los veía emputados y con mi mejor cara les decía te lo dejo chavo y me marchaba jajajajaja un acto de burla disfrazado de caridad, ahhh que tiempos, y que lugares de reunión para los cuates, ayer me entere que uno de mis mejores amigos se va del DF, con el compartí muchos ratos de ocio en las maquinitas y no puedo dejar pasar por alto que jugar arcadias nos abrieron nuevos Horizontes , este post te lo dedico Jonathan Yamil Trejo Rojas ,mi hermano, aun recuerdo cuando solo ibamos a jugar para verle las piernotas a doña Putricia, ( mi primer sueño humedo), te voy a extrañar aunque ya casi no nos vemos, suerte en tu nueva vida y de verdad como extraño mi vida adolescente con mis cuates al lado de una maquinita.
Voy a llorar jajajaja, espero les haya latido y si no me vale, pero seguro mas de uno se acordo de lo que se hacía por un juego de maquinitas.